Me encanta la pasta y hasta ahora no había publicado ninguna receta de lasaña. Para remediarlo, aquí os traigo una estupenda. No es la típica lasaña de carne, ni la típica lasaña de verdura. Es una combinación de ambas que a mí, me encanta, porque no resulta pesada. Además, puedes poner las verduras que más te gusten, yo en este caso, he elegido calabacín y setas, pero admite cualquier otra, como berenjena, champiñones...
No tiene apenas dificultad, sobre todo, cuando tenemos en el frigorífico o en el congelador un poco de carne picada ya rehogada que nos ha sobrado después de preparar cualquier otro plato. Esto ahorra bastante tiempo, por eso yo suelo comprar una bandeja de carne picada grande, la rehogo y la guardo en porciones más pequeñas para cuando me hace falta, como en esta lasaña o en la pizza barbacoa que publiqué no hace mucho.
Por cierto, a pesar de que he leído en varios blogs que las placas de lasaña que no necesitan cocción se quedan duras, yo opino justo lo contrario, o al menos a mí siempre se me han quedado blanditas al sacar la lasaña del horno (en la foto de abajo se ve la "prueba").
Otra ventaja de este plato es que puedes preparar más cantidad y congelarlo, así te saca de un apuro cualquier día que lleves prisa. Lo sacas del congelador, lo descongelas 5-10 minutos en el microondas (mientras se precalienta el horno) y luego, horneas 15-20 minutos con calor arriba y abajo y doras con el gratinador otros 3 minutillos. Y ahora, ¡¡a cocinar!!
Ingredientes (para 2 personas):
1
cebolla
2
ajos
250
gramos de tomate natural triturado (o 2 tomates maduros)
1
cucharada de azúcar
1
cucharada de orégano
6
placas de lasaña
1
calabacín
200
gramos de setas
150
gramos de carne picada de vacuno
1
puerro
50
ml de vino blanco
50
ml de caldo de carne (o media pastilla de caldo de carne y 50 ml de agua)
250
ml de leche
1
quesito
4
cucharadas de copos de puré de patata
Queso
para gratinar
Sal
Aceite
de oliva
Elaboración:
En
primer lugar, vamos a preparar tomate frito. Para ello, pica una cebolla y
tritura dos ajos. Ponlo en una sartén con un chorro de aceite de oliva a fuego bajo,
para que se poche sin dorarse. A los 8 minutos, añade el tomate natural triturado
(o los tomates pelados y sin pepitas picados en cubitos pequeños), la cucharada
de azúcar y un poquito de sal. Deja que se cocine a fuego lento hasta que
reduzca. Prueba y rectifica de azúcar y/o sal, si es necesario. Si has
utilizado tomates enteros, quizá debas triturarlo; si el tomate era natural de
bote, no hace falta.
Prepara
dos cazuelitas de barro o una fuente de horno, lo que prefieras. Pon en la base
el tomate frito que hemos preparado. Cubre con placas de lasaña (yo utilizo las
que no necesitan cocción). Pela el calabacín y pártelo en láminas finas.
Colócalo sobre las placas de lasaña.
Para
preparar la carne, pica el puerro (o una cebolla) y pocha con un par de
cucharadas de aceite de oliva en una sartén a fuego bajo, para que quede
blandito sin tomar color. Unos 10 minutos después, añade la carne picada y
rehoga. Cuando la carne haya perdido el color crudo, echa un chorro de vino
blanco, el caldo de carne (o la media pastilla y el agua) y un poquito de sal.
Pon a fuego medio y espera a que se evapore todo el jugo.
Reparte
la carne picada por la fuente (o las dos cazuelas), coloca de nuevo placas de
lasaña cubriendo todo el espacio y añade las setas (pueden ser naturales o de
bote, si son congeladas, tendrás que rehogarlas previamente).
Precalienta
el horno a 200º con calor arriba y abajo. Cuando hago la lasaña de verduras, en
vez de utilizar bechamel para cubrirla, utilizo un puré de patata muy ligero.
Suelo prepararlo con copos, porque es muy rápido. Para ello, pon en un cuenco el
quesito, la leche y un poquito de sal y mete en el microondas un minuto a
máxima potencia. A continuación, añade los copos de puré, de cucharada en
cucharada para controlar lo espeso que queda (piensa que al enfriarse espesará
un poco más) y remueve bien. Reparte sobre la capa de setas.
Para
terminar, pon el queso por encima (en lochas o rallado, el que más te guste,
pero que funda), mete la lasaña en el horno unos 15 minutos y cambia a posición
gratinar unos 3-4 minutos más para que se dore el queso.
Sirve
acompañada de una ensaladita ligera y ¡a disfrutar!
5 comentarios
Que pinta... a estas horas no puedo mirar esto, me va a dar algo que hambreee
ResponderEliminarQue buena receta Rebeca!! tiene que estar de vicio, y perfectamente explicada.
ResponderEliminarTe felicito!!
Gracias chicas!! Si la hacéis ya me contaréis qué tal estaba!!
ResponderEliminaralaaaa yo subí esta semana una de pollo y espinacas jejeje eque coincidencia. La verdad es que a mi me encantan todas las lasañas, la tuya tiene una pinta estupenda y opino lo mismo de las placas pre-cocidas, a mi siempre me han quedado bien.
ResponderEliminarMuchas gracias!! Yo probaré la tuya, que también apunta bien!!
Eliminar¿Tienes alguna duda? ¿Quieres preguntarme algo o dejar algún mensaje? ¡Hazlo aquí! Me encantará leerlo y responderte.