El crazy cake (bizcocho loco, en su traducción al español; también conocido como wacky cake o depression cake) es un pastel de chocolate que se popularizó en Estados Unidos en las décadas de 1930 y 1940. Eran momentos de escasez debidos a las Guerras Mundiales y al Crack del '29, años en los que huevos y lácteos eran difíciles de encontrar.
Pero además de no llevar esos productos, también es un bizcocho que no requiere báscula ni más utensilios que el molde, una cuchara y una taza. Y el procedimiento no puede ser más sencillo: juntar los ingredientes secos, añadir los líquidos, mezclar, hornear y disfrutar.
Si aún no estás convencido de preparar este pastel de chocolate, te diré que el resultado es un bizcocho esponjoso, nada denso y delicioso. Y si te animas a preparar la cobertura, quien se volverá loco será aquél que lo pruebe. Te lo aseguro.