¿Qué te ha parecido? ¿Te animas a probar esta receta de centolla?
Receta de centolla: cómo cocerla, limpiarla y servirla
Ingredientes:1 centolla (mejor si es gallega)
3-4 litros de agua
180-240 gramos de sal (60 gramos por litro de agua)
1 hoja de laurel
Cómo cocer, limpiar y servir una centolla
Pon una olla con 3-4 litros de agua, la sal y una hoja de laurel al fuego. La cantidad de agua depende del tamaño de la centolla. Lo importante es que, al meterla, quede cubierta por completo. Mientras, sujeta al animal por la parte de atrás con cuidado de no pincharte y de que no te haga daño con sus pinzas, y échale un chorro de vinagre en la boca. Le saldrá un poco de espuma, se desmayará y morirá. Así te aseguras de que está totalmente fresco y de que, al introducirlo en la olla, no se le separarán las patas del cuerpo (es fundamental porque si no entrará agua en el caparazón y perderá sus líquidos interiores). Cuando el agua esté hirviendo, mete la centolla en el agua con el caparazón hacia abajo y, cuando el agua vuelva a cocer de nuevo, calcula el tiempo de cocción:
-Menos de 1 kilo: 10 minutos
-1 kilo: 13 minutos
-1,5 kilos: 16 minutos
-2 kilos: 20 minutos
Una vez pasado el tiempo de cocción, vacía la olla con cuidado y echa agua fría con hielo para cortar la cocción y que la carne no se siga cocinando. Si quieres congelar la centolla para otro momento, mira en trucos y consejos cómo hacerlo.
Mantén siempre a la centolla con el caparazón hacia abajo. Una vez tibia o fría, retira las patas. Levanta la lengüeta que tiene adherida en la parte del abdomen y quítala. Al tirar, saldrá el intestino y quedará un pequeño orificio. Sujeta bien el caparazón y con ayuda de un cuchillo, haz palanca para levantar el cuerpo de la centolla. Ten mucho cuidado al abrirla: su interior está lleno de líquidos y corales (o mirillas, son esferas anaranjadas) y se pueden derramar. La parte superior que se desprende, tiene en los laterales unas zonas grises: son las branquias, los filtros por los que el animal respira. Retíralos con cuidado y tíralos, no sirven.
Una vez retiradas las branquias, parte por la mitad el interior de la centolla y, a su vez, cada mitad en tres trozos. Puedes servir tal cual junto al caparazón y las patas, o sacar la carne de cada trozo y meterla en el interior del caparazón junto con los jugos.
Por último, retira las telillas del interior del caparazón y coloca en una fuente. Casca un poco las patas para que sean más fáciles de comer. Sirve la centolla junto con las patas y la carne del interior.
Trucos y consejos para que la centolla quede perfecta
→ Lo ideal es cocer la centolla en agua de mar. Si no tienes acceso a ella, usa agua con 60 gramos de sal por litro.
→ Puedes añadir un chorrito de vino blanco Albariño o de Ribeiro en el caparazón al servir.
→ Cómo congelar una centolla: Cuece un par de minutos menos de lo que he indicado arriba en función del peso. Una vez esté cocida, colócala sobre un trapo de algodón limpio y húmedo y deja que se enfríe. Envuelve la centolla en el trapo y mete el paquete en una bolsa de plástico (mejor si tiene sistema de cierre hermético, para evitar que coja olores). Guarda en el congelador hasta un máximo de tres meses. Para descongelar, saca y deja en la nevera hasta el momento de consumir.
Esta receta de centolla gallega está hecha en colaboración con Mariscos O'Grove, una empresa de Galicia con más de 20 años de experiencia en el sector, que comercializa, a través de su web, marisco vivo y cocido directamente de las Rías Baixas, así como otros productos gallegos. Cuentan con el sello PescadeRías, de onde se non?, un distintivo que garantiza la procedencia gallega de sus productos.
2 comentarios
Amo el centollo. Es para mí uno de los mejores mariscos. No solo por la carne que tiene sino porque es muy sabroso.
ResponderEliminarQue hacer si al abrir un una centolla el caldo esta negro
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