Pastel crujiente de natillas (ruffled milk pie)

25.6.17

El ruffled milk pie es un pastel crujiente de masa filo y natillas que se prepara de forma muy fácil y cuyo resultado, como podéis observar, es muy vistoso. Conocida en inglés como 'tarta de volantes' o 'tarta rizada', al parecer, tiene su origen en la cocina griega, donde se conoce como galatopita. Combina capas plegadas de masa filo con crema similar a unas natillas que cuajan al hornear.

La masa filo o pasta filo son hojas finísimas, casi transparentes, que se usan superpuestas, a modo de hojaldre, en la cocina mediterránea de la zona oriental (Medio Oriente, Magreb, Grecia, Turquía y los Balcanes). No te preocupes por su tener que trabajar con esta masa: aunque parece difícil de manejar, en este caso no tenemos que preocuparnos por intentar doblar las capas a la perfección, porque, precisamente, la gracia de los volantes está en las irregularidades.

En este pastel destaca el contraste de texturas: el crujiente de la masa filo en la parte de arriba, con la jugosidad de la zona impregnada con las natillas. Además, no es un postre empalagoso, se puede servir tanto templado como frío y puede tener distintos matices, ya que la leche se puede aromatizar de distintas formas: con canela, con naranja o limón, con vainilla...

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Ingredientes (para un molde de unos 20 cm):
8 hojas de masa filo
100 gramos de mantequilla
400 gramos de leche
4 huevos M
150-175 gramos de azúcar
1 rama de canela
Piel de un limón
Azúcar glacé (para espolvorear)

Elaboración:

Precalienta el horno a 180 grados, con calor arriba y abajo (sin ventilador). Derrite la mantequilla en el microondas: calienta durante 30 segundos, saca, mezcla y, si quedan trozos, calienta unos segundos más. Retira la espuma de la parte superior con ayuda de una cucharilla. Prepara el molde en el que vayas a cocinar la tarta e impregna base y laterales con mantequilla derretida. Saca la pasta filo, separa una capa y tapa el resto para que no se reseque.

Receta de pastel crujiente de natillas (ruffled milk pie) 01

Pincela la capa con mantequilla y pliega en forma de abanico sin presionar. Enrolla la capa sobre sí misma sin apretar, formando una espiral, y coloca en el centro del molde. Repite la operación y, con la segunda capa plegada, enrolla sobre la primera. Sigue doblando y enrollando capas hasta cubrir la superficie del molde. Pincela con la mantequilla que ha sobrado por encima y hornea unos 25-30 minutos a media altura, vigilando para que quede ligeramente dorado.

Receta de pastel crujiente de natillas (ruffled milk pie) 02

Mientras se hornea, vamos a preparar las natillas. En primer lugar, infusiona la leche. Para ello, pela el limón, cogiendo sólo la parte amarilla. Pon en un cazo la leche a fuego medio, junto a la rama de canela y la piel del limón. Cuando rompa a hervir, deja un minuto, apaga el fuego y tapa. Pasados 10 minutos, cuela y reserva. Mientras se enfría, bate con varillas los huevos con el azúcar. Cuando empiece a espumar, ve añadiendo la leche poco a poco. Si lo preparas con Thermomix, pon en el vaso la leche con el palo de canela y la corteza de limón. Programa 5 minutos, 100 grados, giro a la izquierda, velocidad cuchara. Cuela y reserva en una jarra. Sin lavar el vaso, pon los huevos y el azúcar y enciende sin tiempo ni temperatura a velocidad 4. Pasados 40 segundos, ve echando la leche aromatizada que habías reservado a través del bocal. Deja que se integre todo bien sin parar la máquina.

Receta de pastel crujiente de natillas (ruffled milk pie) 03

Saca el molde del horno, vierte las natillas entre los pliegues de masa filo y vuelve a meter en el horno durante unos 25-30 minutos, hasta que las natillas cuajen ligeramente. Puedes servirlo en el mismo molde o sacarlo con cuidado a un plato.

Receta de pastel crujiente de natillas (ruffled milk pie) 04

Puedes servir en el momento o dejar que se enfríe. Espolvorea con azúcar glacé justo en el momento de servir.

Trucos y consejos:

→ Es imprescindible tapar la masa filo para que no se reseque. Saca una lámina cada vez y envuelve el resto con film transparente.

→ Si quieres que la tarta quede alta, al plegar las capas, haz unos 5 pliegues. Si quieres que quede más bajita, haz unos 8 pliegues. En función del número de pliegues, necesitarás más o menos capas de masa para llenar el molde.

→ Usa un molde que no sea desmontable, para evitar que se salgan los líquidos.

→ Puedes cambiar la canela por una ramita de vainilla abierta al medio.

→ Puedes sustituir el limón por naranja, a tu gusto.

→ Si no quieres desmoldarlo para evitar que se pueda romper, sirve directamente en la fuente donde lo has horneado. Puede ser un molde de tipo bizcocho o una fuente de cristal o cerámica.

Con este pastel crujiente de natillas participo en El Asalta blogs de junio. Este mes, para cerrar temporada, hemos robado a El toque de Belén, que ha sido el blog ganador. Te invito a que veas su versión de esta tarta ruffled milk pie. ¿Te animas a probar esta receta tan vistosa como sorprendente?