Un drip cake es, literalmente, una tarta que gotea. Este tipo de pasteles llevan de moda desde 2016 y para hacerlos hay que preparar un bizcocho, cortarlo en discos, rellenar con crema, cubrir con más crema y decorar con los característicos goterones de chocolate, añadiendo todo aquello que te apetezca. Puedes usar galletas, chocolatinas, bombones, fruta, frutos secos, merengues... igual que hacíamos con las tartas en forma de letra que también han sido tendencia.
Es fundamental elegir un bizcocho húmedo y denso, para que se mantenga jugoso y estable durante unos días. Conviene preparar una crema consistente que aguante bien, incluso fuera de la nevera, tenlo en cuenta, sobre todo en épocas de calor. Para hacer los goterones, usa chocolate. Si quieres que sea de algún color, puedes teñir chocolate blanco con colorante alimentario (vigila que sea apto para chocolate) o comprar candy melts.
Las decoraciones puedes prepararlas en casa o comprarlas. En este caso, he elegido diferentes dulces con sabores navideños, como los 'cubits' (trocitos de turrón, que he usado en dos sabores), los macarons de turrón, las galletas de estilo barquillo enrolladas o las bolas de chocolate negro rellenas de fruta. Es una forma cómoda y rápida de preparar un drip cake.
¿Te animas a sorprender a tu familia o amigos con esta receta de drip cake de Navidad?