El hummus (o houmous, 'garbanzo' en árabe) es una crema, puré o paté de garbanzos y sésamo, típica de Oriente Próximo y el Mediterráneo oriental. En países como Turquía, Grecia, Líbano o Siria es muy popular, aunque en cada uno de estos lugares se prepara según la variedad local. En este caso no he cocinado la receta de hummus clásico, sino un hummus de remolacha en el que parte de los garbanzos se sustituyen por remolacha cocida.
Hay muchas versiones de la receta de hummus, tanto en cantidades de ingredientes como en uso de especias, pero en cualquier caso es un aperitivo fácil, saludable y rápido, muy sabroso y nutritivo, ideal para picotear acompañado de palitos de pan, colines, tostadas, pan de pita, bastoncitos vegetales crudos (de zanahoria, apio o pepino, entre otros) o unos nachos.
El hummus casero es una buena forma de consumir más legumbres y hacerlo de forma saludable durante todo el año, porque se toma frío; o a la hora de la cena, cuando solemos prescindir de las legumbres porque las asociamos a platos pesados. Por cierto, también se puede versionar con otras hortalizas. Te recomiendo que pruebes el hummus de zanahoria, el de calabaza, pimientos del piquillo, aceitunas... Yo suelo servir varios cuencos con hummus, patés, algún untable vegetal, guacamole, tapenade o tzatziki. ¿Te animas a probar esta receta de hummus de remolacha?
Receta de hummus de remolacha
Ingredientes:1 remolacha cocida (unos 200 gramos)
400 gramos de garbanzos cocidos
1 diente de ajo
1-2 cucharadas de zumo de limón
1 cucharada de tahini*
2 cucharaditas de comino
Aceite de oliva
Sal
1 cubito de hielo
Aceite de oliva
Semillas de sésamo
*Si no tienes tahini (también conocido como tahín o tahina) puedes prepararlo en casa:
50 gramos de sésamo (en algunos sitios lo etiquetan como ajonjolí)
30 gramos de agua
20 gramos de aceite de girasol, sésamo o semillas
Una pizca de sal
Cómo preparar paso a paso hummus de remolacha
Si no lo tienes, prepara el tahini. Si el sésamo es crudo, tuesta un par de minutos en una sartén sin nada de grasa, removiendo para que no se queme. Echa en el vaso de la batidora junto con el agua, el aceite (mejor que no sea de oliva, porque modifica bastante el sabor) y la sal. Tritura hasta conseguir una pasta fina y homogénea. [Sale más cantidad de la necesaria para la receta, pero menos no se puede hacer porque la batidora no lo coge. Lo que sobra, se puede guardar en un tarro de cristal en la nevera y tiene una duración muy larga.] Pon en el vaso de la batidora los garbanzos escurridos, la remolacha, el zumo de limón, el comino, el ajo, la sal y el tahini. Si no tienes tahini, puedes hacerlo machacando sésamo tostado hasta que suelte su grasa y se forme una pasta. Tritura hasta formar una pasta homogénea. Baja de las paredes lo que se quede pegado y tritura de nuevo durante un minuto. Prueba y ajusta de ajo, comino, limón y sal. Añade el cubito de hielo y tritura un minuto más. Quedará muy suave. Echa en un cuenco, añade un hilito de aceite de oliva y semillas de sésamo.
Sirve con panecillos, tostadas, palitos de pan o de hortalizas...
Trucos y consejos para cocinar un hummus de remolacha perfecto
→ Puedes usar garbanzos en conserva o cocerlos tú en casa, como prefieras. Eso sí, tienes que cocerlos solos, no valdrían los garbanzos de un cocido, escudella, puchero, potaje o cualquier guiso similar porque modifican el sabor del hummus.
→ ¿Por qué añadir un hielo? Porque mejora enormemente la textura, que queda mucho más sedosa que si usamos 1-2 cucharadas de agua.
→ Tienes un poco de margen para jugar con la cantidad de garbanzos y de remolacha. Puedes poner entre 250 y 350 gramos de cada, hasta sumar 600 gramos en total.
→ Los condimentos también se pueden adaptar a tus gustos. Puedes poner un poco más o menos de cantidad y usar pimentón dulce, picante o agridulce. También añadir escamas de pimentón por encima al servir.
→ Juega con la cantidad de agua para ajustar la textura a tu gusto: más densa o más ligera.
→ Se conserva en la nevera durante una semana. La mejor forma de guardarlo es en un recipiente hermético.
→ ¿No sabes dónde comprar tahini? Ya lo venden preparado en muchos supermercados como Mercadona o Carrefour. El bote dura bastante una vez abierto, así que no te preocupes por eso. Aún así, se prefieres hacerlo, solo tendrás que machacar las semillas de sésamo tostado con paciencia, hasta formar una pasta.
→ El hummus se puede servir como untable para un picoteo, pero también usarlo como base en una tosta, en un bocadillo, en un pan de pita...
→ El tahini se usa en otras muchas recetas de la zona oriental del Mediterráneo, como el baba ganoush (paté o crema de berenjena), y también como salsa para acompañar el falafel (una especie de croquetas de garbanzos o de habas) o la shawarma (carne asada).
→ Anímate a cocinar una comida o cena turca y prepara también kebab casero.
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