Sushi significa 'arroz avinagrado', aunque se conoce con ese nombre a un grupo de preparaciones típicas de la cocina japonesa que tienen el arroz como base. El mejor arroz para hacer sushi, conocido como sushi-meshi, es el de variedad japónica, de grano corto, no vaporizado y glutinoso. Normalmente los paquetes indican que es 'arroz para sushi', así que no suele haber confusiones.
Además del arroz, otro ingrediente importante para hacer sushi es el vinagre de arroz o sushi-zu. Se mezcla con azúcar y sal para preparar el aderezo del arroz. Una vez aliñado y frío, el arroz está listo para usar. Puedes convertirlo en diversos tipos de sushi: nigiris, gunkan, makis, uramakis, temakis... o preparar un sushi bol, mucho más fácil y rápido e igual de rico.
¿Te animas a cocinar sushi en casa con esta receta de arroz para sushi?
Receta de arroz para sushi
Ingredientes (para 5-6 personas):500 gramos de arroz para sushi (lee el apartado Trucos y consejos)
70 ml de vinagre de arroz
30 gramos de azúcar
20 gramos de sal
Cómo preparar paso a paso arroz para sushi
Lava el arroz 4 o 5 veces hasta quitar todo el almidón. Sabrás que está listo cuando el agua quede completamente transparente. Una vez limpio, cubre con agua y deja hidratar hasta que los granos de arroz se pongan blancos. Tardarán unos 30-40 minutos.
Escurre y añade, por cada vaso de arroz (¡en seco!) dos vasos de agua. El cálculo aproximado por persona es: 100 gramos de arroz seco y 250 gramos/ml de agua. Tapa, pon a fuego fuerte y, cuando rompa a cocer, bájalo y deja cocer a fuego lento durante 10 minutos. No retires la tapadera en ningún momento. Pasado el tiempo de cocción y sin abrir la tapa, deja 15 minutos más de reposo con el fuego apagado. Transcurrido ese tiempo, estará listo.
Mientras cuece, prepara el aliño. Solo hay que mezclarlo hasta que el azúcar y la sal se disuelvan en el vinagre de arroz. Reserva.
Cuando el arroz esté listo, destapa. Ahora puedes comprobar que está tierno. Vuelca en un recipiente amplio que no sea metálico y echa por encima el aliño mientras mueves (con una espátula o cuchara no metálica) y lo abanicas para que se enfríe.
Cuando el arroz esté frío, es el momento de usarlo. Puedes preparar makis, uramakis, nigiris o, lo más sencillo, un bol de sushi.
Lava el arroz 4 o 5 veces hasta quitar todo el almidón. Sabrás que está listo cuando el agua quede completamente transparente. Una vez limpio, cubre con agua y deja hidratar hasta que los granos de arroz se pongan blancos. Tardarán unos 30-40 minutos.
Escurre y añade, por cada vaso de arroz (¡en seco!) dos vasos de agua. El cálculo aproximado por persona es: 100 gramos de arroz seco y 250 gramos/ml de agua. Tapa, pon a fuego fuerte y, cuando rompa a cocer, bájalo y deja cocer a fuego lento durante 10 minutos. No retires la tapadera en ningún momento. Pasado el tiempo de cocción y sin abrir la tapa, deja 15 minutos más de reposo con el fuego apagado. Transcurrido ese tiempo, estará listo.
Mientras cuece, prepara el aliño. Solo hay que mezclarlo hasta que el azúcar y la sal se disuelvan en el vinagre de arroz. Reserva.
Cuando el arroz esté listo, destapa. Ahora puedes comprobar que está tierno. Vuelca en un recipiente amplio que no sea metálico y echa por encima el aliño mientras mueves (con una espátula o cuchara no metálica) y lo abanicas para que se enfríe.
Cuando el arroz esté frío, es el momento de usarlo. Puedes preparar makis, uramakis, nigiris o, lo más sencillo, un bol de sushi.
Trucos y consejos para cocinar el arroz para sushi perfecto
→ Lo ideal es usar arroz de variedad japónica, que está a la venta en muchos supermercados y que suele avisar en el paquete de que es 'arroz para sushi'. Si no lo encuentras, puedes probar con arroz bomba, que tiene características similares. Importante: no uses arroz largo ni vaporizado.
→ El vinagre de arroz también puedes sustituirlo, aunque no conseguirás exactamente el mismo sabor. El mejor sustituto es un vinagre suave de vino blanco, pero necesitarás un poquito más de azúcar cuando hagas el aliño para suavizarlo.
→ Lava el arroz a conciencia, hasta que el agua salga totalmente transparente. Después, ten paciencia para que se hidrate.
→ No destapes la cacerola ni durante la cocción ni durante el reposo. Respeta los tiempos.
→ No uses recipientes ni utensilios metálicos una vez que el arroz esté aliñado. Elige una fuente y una cuchara de plástico, madera, cristal...
→ Enfría el arroz con ayuda de un abanico o, simplemente, un trozo de cartón.
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