Crujientes, delicadas y absolutamente deliciosas, así son las pastas florentinas, unas galletas finísimas, de apariencia sofisticada, que se preparan con almendra, azúcar, miel y nata, se aromatizan con trocitos de naranja confitada y se terminan con un toque de chocolate. Imposible que no estén riquísimas.
A pesar de su nombre, las pastas florentinas no tienen vínculo alguno con Florencia, La Toscana o Italia, y se desconoce su verdadero origen. Parece que podría estar en Francia por el tipo de elaboración, aunque tampoco está claro. Eso sí, hoy se pueden encontrar en los expositores de las pastelerías más exquisitas.
Estas galletas de almendra son perfectas cuando tienes invitados especiales en casa: puedes sorprenderlos con una bandejita junto al café; pero también si quieres hacer un regalo personal, no dejarán indiferente a quien las reciba. Y, por supuesto, quedarán perfectas en una mesa navideña.
¿Te animas a probar esta receta de pastas florentinas?