ensaladas y verduras

Revuelto de guisantes con jamón

26.5.24

Revuelto de guisantes con jamón

¿Sabes que los guisantes son una legumbre? Aunque habitualmente se considera una verdura, el guisante pertenece a la familia de las leguminosas. Puedes encontrarlos todo el año tanto en conserva como congelados, pero durante la primavera (entre marzo y junio) puedes comprarlos frescos y disfrutar de sus granos, incluso, crudos.

Revuelto de guisantes con jamón

El guisante es una buena fuente de proteínas -sobre todo en este caso, combinado con jamón y huevo-, minerales y fibra, pero destaca por su aporte en vitamina C. La planta del guisante también es beneficiosa para el medio ambiente, ya que fija el nitrógeno en el suelo.

Revuelto de guisantes con jamón

Una curiosidad es que se han utilizado como alimento durante milenios, de hecho, se han encontrado restos fosilizados de guisantes en yacimientos arqueológicos del Próximo Oriente que datan de hace casi 10.000 años. Si se llevan consumiendo tanto tiempo, es por algo...

Revuelto de guisantes con jamón

¿Te animas a probar esta receta de revuelto de guisantes con jamón?

Receta de revuelto de guisantes con jamón

Ingredientes (para 2 personas):
300 gramos de guisantes
1 cebolla
1 diente de ajo
100 gramos de jamón serrano
2 huevos
Aceite de oliva
Sal

Cómo preparar paso a paso revuelto de guisantes con jamón

Pela y pica la cebolla en trocitos pequeños. Pon una sartén amplia a fuego medio-bajo con un chorrito de aceite de oliva y, cuando esté caliente pon el ajo exprimido o picado fino y la cebolla. Deja pochar lentamente.

Receta de revuelto de guisantes con jamón

Mientras se hace el sofrito, cuece los guisantes. Pon una cacerola con agua y media cucharada de sal a fuego fuerte. Cuando rompa a hervir, añade los guisantes. El tipo de cocción, depende: lo los guisantes son frescos tardarán unos 8 minutos; si son congelados, unos 12 minutos. Si prefieres usar guisantes en conserva, este paso no es necesario, escurre y estarán listos. Mientras se pocha la cebolla y se cuecen los guisantes, pica el jamón en trocitos pequeños. Añade a la sartén y sofríe.

Receta de revuelto de guisantes con jamón

Cuando los guisantes estén tiernos, escurre y añade al sofrito. Deja que se cocinen unos 2-3 minutos. Si te gustan muy hechos, espera un poco más. Mientras, bate los huevos. Pon el fuego al mínimo, incorpora los huevos batidos y mezcla con una cuchara para que el huevo vaya cuajando junto a los guisantes. El tiempo dependerá de si te gusta jugoso o más cuajado.

Receta de revuelto de guisantes con jamón

Sirve en el momento.

Trucos y consejos para cocinar un revuelto de guisantes con jamón perfecto

→ La cebolla debe quedar muy tierna, para que apenas se note su textura.

→ No pongas más sal que la de cocer los guisantes, pues el jamón aportará suficiente sabor.

→ Puedes sustituir el jamón serrano por jamón cocido o pavo en dados. En este caso, sí será necesario ajustar el punto de sal.

→ A mí me gusta que el huevo quede muy jugoso, así que, nada más echarlo, apago el fuego y remuevo continuamente para que se mezcle quedando muy meloso. Hazlo con cuidado para no romper los guisantes.

→ El huevo no es obligatorio, también puedes preparar este plato como un salteado.

→ Puedes cocinar esta misma receta cambiando los guisantes por habas. O preparar guisantes siguiendo esta receta de habas, en la que los huevos van enteros.

→ Si lo vas a preparar con antelación, te recomiendo que no añadas el huevo. En el momento de comer, calienta los guisantes y añade el huevo batido. Puedes hacerlo en el microondas e ir calentando de 15 en 15 segundos, hasta que quede a tu gusto.

→ Los guisantes reciben diferentes nombres de lo más variado, dependiendo de la región: chícharos,​ petipuás (del francés petit pois), arvejas o arbejas, alverjas, abejaquillas, alvillas, arbellas, arvejanas, arvejos, arvejotes, arvejones, bisalteras, bisaltos, bisantes, bisartos, chicharros, cuchillejos, disantes, fasoleras, garbanetas, guisones, haberos, ilares, moros, nanos, pelaillas, pequeñicos, poas, prinsoles, présoles, pésoles, tabillas, tres reyes... Además, las vainas tiernas, que también son comestibles, se conocen como miracielos, cometodo o tirabeques.

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